Eugenio Hernández vs Cabeza de Vaca, reloaded.
Salió la nota que Eugenio Hernández Flores y la doctora Maki Ortiz irían por la candidatura al senado, nominados por el Partido Verde que hoy dirige con mucho entusiasmo en Tamaulipas Manuel Muñoz Cano, el primero ya fue gobernador de Tamaulipas, Ella la primer mujer presidente de Reynosa, puesto que hoy ocupa su hijo Carlos Peña; y Muñoz Cano fungió como secretario de bienestar social en la administración del ya citado Geño.
Cabe señalar también que en esta zona fronteriza se ha siglado la figura del Verde a favor de la 4T con la nominación de Canturosas en Nuevo Laredo y Mario López a la diputación federal por el cuarto distrito. Esta geografía en el norte de Tamaulipas aporta el 60% de los votos en el Estado. Es de todos conocido la fuerza electoral del alcalde de Matamoros que con sus triunfos in crescendo en las elecciones que hubo del 2018 al 2022, esta última a favor del gobernador Américo Villarreal; de esta forma se hace necesario en la futura contienda electoral con miras a arrollar a la oposición.
Todos los mencionados hasta ahora tienen muchas batallas políticas y electorales en su haber. Incluso todos ellos fueron blanco de la insidia en la administración de Cabeza de Vaca. Hoy el destino los une en una circunstancia muy poco probable en otros tiempos. Se arropan con el Partido Verde para darle a este lustre y empaque de ganador.
El perverso y morboso que me habita piensa en los encuentros que tendrán todos ellos en el congreso después de las escaramuzas políticas que han tenido a lo largo de su vida. Geño fue gobernador de Tamaulipas cuando Cabeza de Vaca fue presidente municipal de Reynosa del 2005 al 2007, situación que no estuvo exenta de roces. Se especula que Eugenio pudo haber aplicado severidad a su poder de gobernador en contra del entonces alcalde fronterizo pero se retractó.
Cuando Cabeza de Vaca fue gobernador no tuvo la magnanimidad del entonces priista y aplicó todo el rigor de su administración sobre la figura del ingeniero victorense y lo metió a la cárcel. Eugenio vivió la crudeza de la experiencia tras las rejas. A muchos tamaulipecos que conocían bien a Eugenio les pareció excesivo el castigo.
Dicen que el azar juega mucho en la política. Hoy los azarosos caminos de la misma nos tienen en la posibilidad de un encuentro cara a cara en las próximas legislaturas, tanto del congreso como del senado de estos dos políticos, uno de Tamaulipas y otro del estado de Texas, pero con doble nacionalidad.
Por su parte la familia Peña Ortiz, Maki candidata al senado y Carlos Peña con toda la posibilidad de ir por segunda ocasión a la candidatura a la presidencia municipal de Reynosa han tenido a lo largo de su vida diferencias diametralmente opuestas con el exgobernador panista.
Madre e hijo tuvieron que lidiar con el peso del poder de un gobernador de su mismo partido. Triunfaron electoralmente no gracias a él, si no a pesar de él, y eso solo ensañó más al residente de Mission, Texas contra esta familia. Hoy el tiempo que es jocosamente irónico los pone en una situación de iguales con una ligera ventaja a favor de los hasta ahora agraviados Maki Ortiz y Carlos Peña. También es muy probable que se vuelvan a ver las caras, pero en otro contexto, ya sin la hubris del exgobernador.
Mario López también tuvo que lidiar con la soberbia del panista exgobernador pero lo supo torear a pesar de los amagues de poder que contra él tuvo la administración albiazul.
La vida ha dado un giro para el probable reencuentro de todos ellos; las circunstancias son otras en el país y el Estado. Los que fueron poderosos hoy no lo son tanto, y los que tenían que esconderse ya no lo tienen que hacer. Ni a Netflix se le hubiera ocurrido en su mar de ficciones esta morbosa y atrapadora realidad.
Querido y dilecto lector, estaremos expectantes para ver este drama político que promete ser de pronóstico reservado.
El tiempo hablará.
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